La cirugía bariátrica es el procedimiento más efectivo para el tratamiento de la obesidad mórbida. En algunos casos en los cuales el paciente ha recuperado peso o se ha producido una complicación quirúrgica, el equipo de profesionales de nuestra unidad revisa el caso para determinar las causas y encontrar el tratamiento más adecuado. El Dr. Vilallonga es experto en cirugía de revisión bariátrica de alta complejidad.

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Una opción no invasiva para tratar el sobrepeso y la obesidad, en casos de un exceso de peso moderado (para perder una media de 15 kgs) es colocar una esfera de silicona –balón gástrico o intragástrico- dentro del estómago. Es una intervención ambulatoria, de una media hora de duración, que no requiere ingreso en el centro hospitalario y para la cual se prepara al paciente con sedación endovenosa, y evitar así toda molestia, pero sin necesidad de anestesiar.

Utilizando un catéter, se conduce el balón, desinflado, desde la boca, pasando por el esófago hasta el interior del estómago. Una vez dentro, a través del catéter se envía líquido para llenar el balón que, ya inflado, produce la sensación de saciedad en el paciente, puesto que ocupa una parte importante de su estómago. Así el paciente lo tiene más fácil para limitar la ingesta de alimentos a aquellos nutrientes que necesita su organismo para funcionar correctamente en el día a día.

El volumen que ocupa el balón en el estómago es una ayuda importante para que la persona que lo lleva pueda aplicarse hábitos dietéticos y ejercicio físico para perder peso sin la dificultad que hasta entonces había tenido porque el apetito le demandaba comer mucho y a menudo. Con el balón, la sensación de saciedad es su principal cómplice para adelgazar.

Normalmente, la colocación del balón se recomienda a personas con una obesidad que no llega a ser mórbida, es decir, con un sobrepeso de entre 15 y 25 kgs, lo equivalente a un IMC (índice de masa corporal) de entre 30 y 35 kgs. De todos modos, antes de decidir este tratamiento, el equipo médico se asegurará de la capacidad personal del paciente para comprometerse a llevar la dieta y hábitos saludables que el médico especialista indicará y supervisará paulatinamente. En caso de presentar trastornos endocrinológicos, problemas de coagulación o hernia de hiato, el tratamiento con balón se desaconseja.

6 meses o un año

Una opción de tratamiento es llevar el balón durante 6 meses, y luego retirarlo. A continuación, el paciente debe continuar el proceso de adelgazamiento siguiendo una dieta equilibrada durante los meses posteriores. En los casos de mayor cantidad de grasa a eliminar, el balón se deja en el estómago durante 12 meses, para que el paciente tenga más tiempo para acostumbrarse a llevar una dieta adecuada que le facilite eliminar su sobrepeso.

Salvo alguna molestia por posibles náuseas los dos o tres primeros días tras la introducción del balón en el estómago, el paciente puede llevar una vida totalmente normal mientras sigue el tratamiento. Su pérdida de peso llegará a medida que vaya implementando sus hábitos saludables, comiendo lo más apropiado y su justa cantidad, y realizando ejercicio físico como complemento clave en su adelgazamiento.

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El método más natural para reducir peso es haciendo dieta y ejercicio físico. Pero para conseguir resultados a largo plazo, es necesario contar con la ayuda de un equipo multidisciplinario formato por endocrinólogos, dietistas y psicólogos que pautarán el tratamiento dietético más adecuado según las características y patologías asociadas a cada paciente.

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Determinadas enfermedades gastrointestinales se pueden evitar aplicando un tratamiento dietético y unos hábitos adecuados. Es el caso de la celiaquía, el reflujo gastroesofágico o la indigestión. En nuestra unidad analizamos las características de cada paciente, indicando las pautas dietéticas más recomiendas por cada patología.

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