En la actualidad, se desconocen las causas que provocan la EII, pero se apunta a un mal funcionamiento del sistema inmunitario, a factores genéticos y ambientales, y a problemas de dieta y estrés como posibles factores. En España, se ha registrado un aumento de los casos en las últimas décadas. 

¿Cuáles son los tipos de EII más habituales?

• Colitis ulcerosa: presenta inflamación en las paredes del intestino, lo que provoca llagas (úlceras) que causan dolor. Puede afectar una parte de intestino grueso (proctitis, proctosigmoiditis, colitis izquierda, colitis extensa) o todo el colon (pancolitis).
• Enfermedad de Crohn: se caracteriza por una inflamación permanente de cualquier parte del tubo digestivo.  Aunque normalmente afecta las capas más profundas, puede aparecer desde la boca hasta el ano.

¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas de la EII varían según la intensidad de la inflamación y el lugar donde se desarrolla, y se presentan en brotes a lo largo de la vida del paciente, pasando por épocas activas y otras de remisión. Los más comunes son:

• Diarrea
• Fatiga
• Fiebre
• Sangre en las heces
• Dolor y cólicos abdominales
• Disminución del apetito
• Pérdida de peso y anemia

La enfermedad inflamatoria intestinal es una enfermedad crónica que no cuenta con un tratamiento definitivo, y su evolución varía en función de cada paciente, por lo que es necesario un seguimiento y una especialización rigurosa con el fin de mejorar la calidad de vida de quienes la padecen.

A pesar de que no suele ser mortal, la EII es debilitante para quienes la padecen, y puede derivar en complicaciones graves. Por ello, es esencial acudir al médico en cuanto se detecten síntomas o un cambio persistente en los hábitos intestinales.

En Corachan disponemos de un amplio equipo de especialistas dedicado a las enfermedades que afectan al aparato digestivo, donde podremos hacerte un diagnóstico completo y resolver todas tus dudas.